martes, 2 de marzo de 2010

TRAVESIA DE RESISTENCIA GRANADA LA COSTA 2010

Como viene siendo habitual Fernando Serrano nos avisó de la travesía de resistencia Granada – la Costa 2.010, no sé como lo hace, pero siempre se entera de carreras que nosotros nunca habíamos oído hablar, y lo mejor de todo es que siempre son buenas.

A mi esto de la travesía me llamó la atención cuando me lo comentaron Fali y Rocío el año pasado para ir a la de Grazalema, de hecho este año me quede con las ganas de ir, cosa que no pudo ser por la fascitis plantar que llevaba arrastrando desde hacía tiempo.

Total que cuando lo dijo Fernando, a mi me pareció bien, además pensé que podía ser un buen entreno para el Gran Trail de Peñalara, al que vamos a ir seis amigos del club, el estar tantas horas en movimiento te puede dar un puntito bueno.

De la inscripción se encargo Fernando, no sé como lo hizo, pero consiguió plazas para nosotros dos, en principio nadie mas se animó y cuando se quisieron apuntar ya era tarde. No entiendo como la Federación pone tantos problemas a los organizadores con el cupo. Por lo que nos contaron, había 150 plazas y 30 clubs hicieron la solicitud, de los cuales a cada club le correspondía 6 plazas. Si multiplicamos ya están pasados. Al final se quedaron 10 club de los que hicieron la solicitud sin plazas. Es una pena que pongan limitaciones a estas actividades y que tanta gente se quede sin poder participar. Y que participen algunos que no deberían ni salir a la puerta de su casa, si no saben comportarse es mejor dejarlos encerrados. En concreto me refiero a uno moreno con barba, de unos 45 años, 1,70 cm y unos 80 kilos. Este personaje se dedica a tirar basura al suelo en medio de un parque natural, iba delante mía y cuando lo vi y se lo recriminé, al tío solo se le ocurre decirme una bordería al igual que le dijo al que iba delante de el, cuando educadamente le dijo que eso estaría allí por muchos años. No entiendo como personas así pueden salir al campo, para eso que se vayan a comerse un arroz a la parcela de su amigo y que le guarre a el.

Llegamos por la noche al polideportivo de Churriana, y después de dejar las cosas donde dormiríamos nos fuimos a tomarnos una cañas con unas tapas como Dios manda, a las 10 nos dieron la charla y a hacer un poco de tiempo a que entrara el sueño.

Creo que lo peor del día fue el levantarse; no porque tocaran diana a las 2’ 45 sino por la forma. No os podeis imaginar que te despierten con Miguel de Molina a todo trapo tocando un yo que sé, pero no un rato sino todo el disco y a toda leche, no es coña allí ese tío estuvo cantando mas de media hora a toda leche, yo que soy mas de heavy que de otra cosa, eso duele y mucho.
Cogimos los autobuses y nos llevaron a Restábal, un pueblecito, donde nos dieron un caldo caliente, que a esa hora venía de lujo, hacía un frío tremendo. Por lo menos no nos llovería, dejo de llover justo cuando empezamos y volvería la lluvia a las pocas horas de terminar la travesía. Eso si frío todo el que quieras y mas.

Empezamos a andar justo cuando lo tenían previsto, es tremendo como tenían medido los tiempos, el guía no se desvió del tiempo ni una sola vez ni en un minuto. Yo iba como una maleta no me había mirado el rutómetro y no sabía cuanto ibamos a ir para arriba o cuanto para abajo y cuando teniamos el desayuno, si es que lo teniamos, ni siquiera sabía si ibamos a pasar por pueblos, son las comodidades de esto que tu no conduzcas y que te lleven, lo que pasa es que estaba un poco perdido, menos mal que que lo eché en la mochila y al final si que lo fuimos mirando. Recuerdo que empezamos una subida que imaginaba debería ser muy bonita para hacerla de día, sobretodo cuando llegamos arriba. En la bajada pasamos por varios pueblos ( Conchar, Cozvijar), seguimos por el cauce de un río que llevaba agua a mansalva. Ya amaneciendo fuimos bordeando unas lagunas en el que había bastante barro y que nos llevo a un pueblo llamado Padul, donde estaba el desayuno. La parada se me hizo corta, me hubiera gustado darme un poco en los talones, me estaban dando unas pequeñas señales de alarma que me estaban acojonando, no quería empezar otra vez con la fscitis, subiendo no tenía problema con los talones pero llaneando y para abajo si que me molestaban.

Después del pueblo hicimos una subida continua de unos 8 km, no muy pronunciada, pero preciosa entre pinos, el ritmo era constante pero bueno, llaneando y cuesta abajo si van rápido, pero para arriba la cosa cambia. Fernando y yo lo comentamos que hubiéramos preferido más alegría. En realidad lo que ibamos buscando era un entreno, bajo de pulsaciones, pero de larga duración, la cuestión era que había que subir las pulsaciones.

A lo largo de esta subida había unas vistas alucinante, una vez arriba tuvimos un sube y baja muy bonito, que daría paso a una bajada muy larga como por el cauce de un río de unos 6 km y que fue un poco coñazo por la arena y gravilla que había durante toda la bajada, ahí eche de menos las polainas que me había dejado en Churriana, tuve que parar varias veces a quitarme las piedrecitas. Al final de esta bajada llegamos al km 40 donde después de cruzar el río Dilar nos espera un bocata que sabía a gloría. Ya nos quedaba la última subida pronunciada de 3 km y una bajada tranquila de 10 km a Granada llegando a la Zubia.





Fue mi primera travesía y me gusto la experiencia, pero había veces que se me hacía larga la caminata, echas en falta ponerte a correr. El parque natural, una preciosidad. La organización excelente, excepto por la broma por llamarlo así del despertar. La compañía de Fernando fantástica como siempre y buen compañero, además no ronca. Lo malo, el camino de vuelta a Córdoba, después del madrugón y la caminata coger el coche fue duro, yo preferí ni ducharme cuando llegamos, fue llegar y directamente me monte en el coche y me vine para evitar lo más posible la noche, tenía miedo a dormirme. La nota negativa sin duda alguna el capullo de barbas.

Si le interesa a la organización quien es este capullo, sólo tienen que decírmelo y les mando unas fotos del personaje. Descubrí después al llegar a casa que me sale en varias. Ahora me arrepiento de no haberlo denunciado a la organización.

Al final 54 km, 2.092 mts de ascensión y 1.902 mts de descenso, tiempo 14 horas.
Fernando Fernández de Mesa

2 comentarios:

  1. Fernando, guapo comentario de la travesia, un dia de los que me gustaria provar que me perdi.
    Sobre el tio guarro ese tendria que volver al colegio , porque teniendo 45 años parece que tiene solo 9 añitos o menos.
    Bueno a otra cosita que iva, por lo de la mochila en peñalara si quieres no te preocupes pues si se nos pude seguir en varios puntos de la carrera mi mujer lo hara y las llevara ok.

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  2. Fernando, magnífico comentario de esta travesía, y me encanta que te haya gustado mucho la zona de los Alayos, Silleta del Padul.
    hay un foto muy bonita en el post con el Trevenque al fondo nevado, además llevas una mochila guapa y cara, esa Salomon XT Wings es cojonud.., yo la tengo igualmente y no la cambio por nada para trails ligeros.
    Saludos y reitero mi enhorabuena
    Emilio J
    http://granadaultratrail.blogspot.com

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